Gabriel Meza
La Cañada del Diablo ardió.
Todos Santos –una vez más- fue testigo de un incendio que consumió más de 13
hectáreas del bello Pueblo Mágico. Más de 90 bomberos, rescatistas y equipo de
la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) combatieron el fuego por más de dos
horas, terminando con el siniestro.
Desde las 11:00 horas, el
combate a las llamas inició. Rápidamente, traga fuegos de esa comunidad,
pidieron apoyo a la capital estatal. Sin embargo, la falta de gasolina atrasó
el arribo de los bomberos de La Paz pero ya, desde Los Cabos llegaban
integrantes de ese cuartel.
El Gerente Estatal de la
CONAFOR, Francisco Flores González, comunicó que fueron consumidas 13 hectáreas
de palmar natural, de las cuales, nueve incumben a arbolado adulto y cuatro a
renuevo. Dijo que el incendio se logró controlar hasta las 12 de la noche de
ese mismo día, con la participación de CONAFOR y los cuerpos de emergencia y
Protección Civil (estatal y municipal) se encuentran en el lugar hasta que no
represente peligro alguno para la población.
Otro problema que enfrentaron
–los bomberos- fue la falta de agua para combatir el acontecimiento. La Policía Preventiva de
Todos Santos detuvo -como sospechoso- de haber participado en el inicio de ésta
conflagración: Agustín Morales Santiago, oriundo del estado de Durango y de
ocupación como jornalero agrícola.
El funcionario federal aseguró
que el incendio fue provocado; “como sucede en el 99 por ciento de los casos”.
La intrusión del ser humano está presente en los incendios forestales, por lo
que hizo un llamado a los vacacionistas y a los residentes de la población para
que eviten realizar fogatas, tirar colillas de cigarrillos, botellas de vidrio
y otros materiales flamables que puedan originar un siniestro, así como tomar
las precauciones debidas al encender fogatas.
Invitó a la población, si son
testigos de algún siniestro, a llamar al teléfono 01 800 INCENDIO(46236346)
donde de inmediato se atenderá por el personal de CONAFOR.
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