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El afectado manifiesta que policías estatales en
estado de ebriedad le exigían “una madre” y dinero
Giovanny Carlos Díaz
La noche del pasado 22 de
noviembre de nueva cuenta policías estatales protagonizaron una lamentable
escena en donde el alcohol, armas y prepotencia estuvieron presentes, estos
tres factores antes mencionados por los mismos elementos estatales en contra de
un joven quien nos relata cómo sucedieron los hechos los cuales tienen como
resultado el cese de tres agentes estatales por un supuesto abuso de autoridad.
Un joven de aproximadamente 20
años a quien llamaremos “afectado” narró en exclusiva para este Semanario los
acontecimientos de la noche en la cual con lujo de violencia fue introducido a
un domicilio particular ubicado en la calle Laja #153 en la colonia Progreso,
pues asegura que siendo aproximadamente las 20:30 horas y casa antes de llegar
a su domicilio detuvo su coche detrás de una automóvil marca pick up blanco sin
placas del cual descendió una persona armada identificándose como agente
estatal quien le pidió mediante amenazas y con lujo de violencia descendiera
del carro y se metiera a la casa de los que resultarían ser agentes estatales en
completo estado de ebriedad y por si fuera poco, armados. Asegura el afectado
que cuando fue bajado de manera violenta de su carro fue su novia quien al ver
los hechos de prepotencia dio parte a las autoridades mediante una llamada al
C4 mientras que al interior de la casa ubicada con el número 153 de la calle
Laja ya tenían a su novio.
Relata el “afectado” que una
vez adentro, los policías estatales le pidieron que bebiera una cerveza con
ellos, argumentando este que él no tomaba, razón por la cual le apuntaron a la
cabeza y lo obligaron a beber el “bote” porque no aceptaban un desprecio.
Dentro de los hechos narrados para este Semanario, asegura el afectado que al
interior de la casa se encontraban 4 agentes estatales quienes en todo momento
le exigían que consiguiera “una madre” o dinero, percatándose que además de las
armas que portaban sobre la mesa había una cantidad considerable de balas
motivo por el cual decidió llevar la fiesta tranquila y escuchar los
comentarios de los estatales muy a su contra. Mientras que esto pasaba al
interior de la casa, una patrulla estatal llegó al lugar para dar aviso de que
soltaran a la persona ya que la cosa se había puesto grave por los llamados que
habían recibido mediante C4, razón por la cual una agente llevó hasta su casa
al afectado diciéndole que ya no saliera. Para ese entonces elementos de la
Agencia Ministerial atendieron el llamado, se introdujeron al domicilio en
busca del afectado y se encontraron con elementos estatales en estado de
ebriedad quienes apuntaban con sus armas en clara señal de reto. Todo esto fue
presenciado por el afectado quien comenta que un agente de la policía
ministerial fue por él a su casa para que identificara a las personas que lo
habían amagado momentos antes, reconociendo a quienes aún se encontraban dentro
de la casa antes citada.
Después de estos hechos y del
enfrentamiento verbal entre estatales y ministeriales, una vez controlado los
hechos y que compañeros de la policía estatal auxiliaron a los ebrios policías,
asegura el afectado haber recibido algunas amenazas por parte de los agresores
donde le aseguraban que “volverían mañana por ellos”, testimonio que consta en
la declaración ante el ministerio público y de la cual existe un video sobre
estas palabras.
De nueva cuenta se pone en
entre dicho la corporación policíaca la cual se jacta de ser acreditable y de
tener los más estrictos exámenes de control y confianza de los elementos que
ingresan a esas filas, además de que ante la opinión pública la estampa de los
policías, independientemente el rango, se encuentra desvirtuada por actos como
estos en donde el alcohol y el uso excesivo o abuso de autoridad fue de manera
notoria y ahora compromete los códigos éticos que el secretario de Seguridad
Pública, Álvaro de la Peña Angulo ha tratado de establecer para elevar el nivel
de credibilidad de los agentes ante la misma sociedad.
Este mismo viernes el
Secretario de Seguridad Álvaro de la Peña, anunció la separación de estos
elementos de la dependencia por los hechos efectuados, dándole seguimiento de
ley y las penalizaciones a las que se hagan merecedores.
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