lunes, 29 de octubre de 2012

Transportistas clausura una parte de la carretera La Paz-Pichilingue



Gabriel Meza

 “Quieren desplazar a la gente, no es justo, por personas arbitrarias como él, estamos sumidos en  la pobreza”, declaró a El Independiente, el líder sindical Alianza San Martín, Martín Antonio Sánchez, quienes desde la noche del 18 de octubre se plantaron en el entronque a la carretera a La Paz-Pichilingue.

Los transportistas continuaron al día siguiente, con la protesta contra la empresa Logística Geos; el conflicto estalló por supuestas prácticas desleales en contra de los dueños de camiones de carga local.

La empresa foránea habría acaparado la carga de los desembarcos que ocurren diariamente en el puerto de Pichilingue, acusando a Mariano Ruano (dueño mayoritario y representante de Baja Ferries) de atentar contra cientos de familias dependientes de la actividad.

El Ministerio Público asistió para verificar sí no se había cometido algún delito federal, sin embargo, no fue así, debido a qué sólo estropean la circulación en una de las arterias. Desde temprano, agentes de la Policía Municipal llegaron al lugar para verificar y evitar el bloqueo total de la vía de comunicación.

La problemática se agudizó cuando Logística Geos comenzó a transportar material de la empresa Apasco, productos que desde hace años eran transportados por el grupo sindical, provocando un enojo generalizado de los hombres-camión sudcalifornianos. De prisa, los reproches a Ruano no se hicieron esperar culminando en la manifestación y el paro de un par de camiones de la empresa.
“Teníamos a cemento Apasco, por años lo estuvimos moviendo, pero se fueron metiendo como la humedad […] Se hicieron de parque vehicular considerable, con plataformas dobles, acaparando toda la carga […] Con cinco que metan, ya no descargamos nada […] Nos desplazan del trabajo que nosotros podemos realizar”, declaró a El Independiente.

Culpa de la desigualdad laboral al monopolio de Baja Ferries y Logística Geos por su deseo de acaparar al 100 por ciento los movimientos que ocurren en el muelle; “él ni siquiera es sudcaliforniano”, agregó.  Hasta el momento, no hay un acercamiento entre ambas partes y los inconformes auguran que seguirán protestando por las malas prácticas de la firma.

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