Las elecciones no deben dividir a los Sudcalifornianos: Juan Alberto Valdivia Alvarado

Crisstian Carlos

Para el diputado priísta Juan Alberto Valdivia Alvarado, el proceso federal electoral que se vive en estos días, es tan importante como la preservación de la paz social, por lo que consideró que si el ejercicio de la libertad de expresión, el acceso a la justicia, el respeto de los derechos humanos y los procesos electorales están diseñados para dar curso a las inconformidades y diferencias, no deben trastocar la tranquilidad a la que todos aspiramos.

Lo anterior fue señalado por el legislador en un pronunciamiento ante el pleno del Congreso en donde señaló que una de las aspiraciones más sentidas de toda sociedad es mantener la paz entre sus integrantes y que para lograrlo existen reglas y mecanismos que permitan dirimir nuestras diferencias por vías legales y pacíficas y ahora que estamos a semanas de la elección federal, en la que elegiremos al nuevo presidente de la república e integrantes del Congreso de la Unión, debemos sumamos al compromiso ciudadano de ejercer nuestro derecho a decidir sobre el futuro de México y del estado, con estricto apego a las reglas y derechos que rigen nuestra participación para que, cualquiera que sea el resultado, los mexicanos podamos sentirnos satisfechos de un proceso cuya legitimidad no sea cuestionada y no agrave las diferencias.

Valdivia Alvarado agregó que su partido el Revolucionario Institucional hemos venido trabajando para mantener un contacto cercano con la población, han realizado acciones cumpliendo con el marco normativo y respeto de las expresiones de todos los ciudadanos que no respaldan nuestro proyecto político.

Agregó que están satisfechos de la aceptación ciudadanía y de abonar con el ejemplo a un proceso electoral que transcurra dentro de los márgenes de la civilidad política y de la propuesta, que no divida ni genere enconos entre la población.

Destacó que integran un partido con identidad, historia y amplio aprendizaje al que el juicio de la historia y la conciencia nacional en un ejercicio de comparación les está dando una nueva oportunidad de dirigir el rumbo del país, por lo que de cara a la población, que es el mejor juez en las lides políticas, sin necesidad del doble discurso, de renegar del pasado ni negar afinidades, realizamos una campaña ejemplar, respetuosa y enfocada en la gente, sin necesidad de confrontaciones ni de responder a ataques infundados.

Agregó el legislador que no pretenden arrebatarle nada a nadie con ardides oscuras, trabajan con el propósito de lograr nuestras metas, pues no es el PRI el que emprende cacería de brujas, que reniega de su militancia, que recurre a la calumnia y a una doble moral para lograr el triunfo en la contienda electoral, como tampoco es su dinámica electoral fomentar rencores personales, pues son un partido responsable y maduro. Destacó que en la agenda del partido están las comunidades, sectores y organizaciones civiles con los que dialogan y nunca para lanzar acusaciones a los actores políticos, sino en el trabajo con la gente, sin denostaciones o agravios, pues el respaldo que queremos está en la gente, no en las debilidades de nuestros adversarios.

Convocó al resto de los actores políticos a que transiten en estas mismas vías, de trabajo con la gente, de competencia franca y de cara a la población, pues la desesperación no es buena consejera, ni recurrir a prácticas que enturbien el proceso electoral, que mermen la legitimidad de las instituciones y desalienten a la población.

Finalizó el legislador al hacer un llamado a nombre de la Fracción Parlamentaria del PRI, a los actores de los diversos niveles de gobierno, para que el proceso electoral se lleve en apego a la norma, dentro de los cauces de la civilidad política y en estricto respeto a los principios de legalidad, imparcialidad, objetividad, certeza e independencia, pues los mexicanos queremos participar en libertad en un proceso limpio, que la jornada electoral no concluya con inconformidad y sospecha, sino que materialice el ejercicio pleno de nuestros derechos y obligaciones como ciudadanos.