Arsénico influye en envejecimiento precoz en adultos

Gabriel Meza

 

• Provoca cáncer en órganos internos

Para añadir más argumentos negativos a la llegada de empresas mineras a Baja california Sur, la especialista en investigaciones biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Eugenia Gonsebat, explicó los inconvenientes que se desencadenan al estar expuestos al arsénico en la salud humana.

Además del cáncer de piel, la presencia del letal químico contribuye al desarrollo de enfermedades crónico degenerativas, diabetogénicas y carcinoma en órganos internos. Fue en 1999, cuando estudios demostraron las complicaciones derivadas por este material. Habló sobre un caso sucedido en Bangladesh, India en el que expertos buscaban la cura para males gastrointestinales de los habitantes. Creyeron que el contenido de microorganismos del agua eran los causantes. Luego, decidieron perforar pozos en otras zonas pero no se imaginaban –describe la científica- que el subsuelo estaba repleto de arsenopirita y al triturarlo cayó al agua, oxidándose y transformándose en arsénico.

Desde entonces, el caso sirvió de parámetro y se atreve a compararlo con la situación de la media península donde existen grandes depósitos de arsenpirita en estado natural. Indicó que se conoce suficiente para determinar –con una evaluación de riesgo- los problemas que podrían suscitarse en la región. “Las autoridades siempre dan mucho tiempo para explicar” insinuando que todo podría llevarse a cabo determinando proporcionalmente en las distintas regiones.

Ve con preocupación la llegada de corporativos que intentan perforar suelos donde se encuentra la presencia del material. “Conocemos los riesgo de los metales más tóxicos, sabemos de los peligros, no tenemos que esperar”, expresó la investigadora. Comentó como la administración de George Bush cambió la legislación en Estados Unidos para permitir –en el agua- la presencia de arsénico de 10 partes por millón a 25 partes por millón. Los especialistas no permitieron tal acto y a tres meses de ello se cambió la ley por la peligrosidad. En el territorio los niveles son mayores.

Gonsebat aplica experimentos en ratones para determinar como afecta el cerebro la ingesta de arsénico. Ha demostrado que afecta en la memorización y aprendizaje, “genera daños oxidativos en el cerebro de los ratones, envejecimiento precoz, debilitamiento immunológico”.