jueves, 20 de junio de 2013

Celebran el XIX aniversario del área protegida Sierra La Laguna

Gabriel Meza

A 19 años del decreto de la Reserva de la Biósfera Sierra La Laguna, el director de la Región Pacífico Norte y Península de Baja California de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Benito Bemúdez Almada reconoce que es la zona con menos erosión, en las más de mil 124 kilómetros cuadrados, “con una tasa de desforestación nivel cero”.

En el marco de la celebración de las festividades del área conservada por el gobierno mexicano, el funcionario federal resaltó la calidad ambiental del sitio y “la prueba es los estudios efectuados por la UNAM, la UABCS y la reciente publicación del CIBNOR acerca de los valores de diversidad de las formas endémicas”.

“La integridad ecosistémica prevalece”, resalta Bermúdez Almada en Poliforo de la UABCS donde se desarrollaron diversas actividades de educación ambiental con los estudiantes.  Atribuye el excelente estado de la franja protegida al trabajo conjunto de dueños de la tierra, académicos, gobiernos e institutos de investigación.

Otro factor que resaltó, los bajos cambios de uso de suelo que se experimentan comparados con el resto de la república mexicana. Para él, es una fortuna que los sudcalifornianos “podamos tener un reservorio de los recursos naturales” como Sierra La Laguna.

Para Conanp, Sierra La Laguna no tiene amenazas severas “hay espacios degradados de cientos de hectáreas que no son considerables, los cuales deben aún deben ser reforestados”.

Uno de los retos a casi 20 años, es “mejorar la calidad de vida del ranchero sudcaliforniano”. Una sierra en óptimas condiciones “y una población marginada de sus derechos […] “Es preocupación de todos los que estamos trabajando en esto, el sector público, social y privado”.

Por ello, resalta la vinculación de las tres esferas de gobierno, planteles educativos y pobladores para desarrollar – las tan necesarias – actividades económicas en base a las “capacidades de la zona como el turismo y aprovechamiento de los recursos”.

Esta región comprende el ANP homónima (decretada en 1994); se puede considerar como una “isla” de vegetación en el entorno árido característico de la península de Baja California. Como resultado directo de los procesos geológicos, la región presenta características de endemismos y se le considera como un centro de evolución reciente.

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