miércoles, 26 de septiembre de 2012

Entrega el Gobierno bonos a pensionados y jubilados de la entidad



·         Recibieron 3,352 trabajadores en retiro del SNTE, 17 mdp

Benedicto Hernández Zepeda

Bonos que en total representaron una erogación de 17 millones de pesos, fueron entregados por el Gobernador del Estado a 3,352 maestros en retiro, con lo que se busca mejorar las condiciones de vida de quienes fueron parte del sector educativo estatal y quienes durante su estancia en las aulas, además de educar a las nuevas generaciones, trabajaron para construir un estado que hoy es referente de paz social y tranquilidad a nivel nacional.

En el acto de entrega de bonos, el ejecutivo estatal estuvo acompañado del secretario de Educación, Alberto Espinoza Aguilar y del secretario general de la sección III del SNTE, Mateo Casillas Ibarra, al dirigirse a los homenajeados, les dijo que son parte de la generación de maestros pendiente de lo que pasa en la sociedad, a quienes pidió que le sigan ayudando con sus propuestas para lograr mejores resultados educativos, porque la educación es la mejor herencia para nuestros hijos y el camino más seguro para el desarrollo de Baja California Sur.

Y agregó que todos debemos de contribuir en lo que éste a nuestro alcance, para que la entidad no sufra la inseguridad que viven otros estados de la república y otros países y llamó a los maestros para preservar la grandeza que distingue a Baja California Sur, que también llegue a nuestros hijos y que estos la transfieran a sus descendientes.

Covarrubias Villaseñor dijo tener un gran respeto por el magisterio, y sentirse orgulloso de la formación académica que recibió de sus maestros, del cariño y del afecto que le transmitieron al paso por sus aulas y que conformaron una generación que no estaba preocupada solo por la preparación académica de los jóvenes y niños, pues soy testigo que además de la instrucción académica, le daban seguimiento al joven y al niño por moldear la educación adicional a la que se recibís en el hogar.

Recordó que fue parte de una generación de alumnos, que recibían con respeto la llamada de atención de los maestros y de vez en cuando un reglazo cuando era merecido y que no se atrevía uno a acusarlos con sus padres, porque las consecuencias eran peores y añoró los tiempos en que los maestros se preocupaban por moldear la educación con la vida familiar, pues muchos alumnos llegaron a convertirse prácticamente en sus hijos.

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